El silencio se impuso
En la partida.
Con sus ases bajo la manga,
Con sus murallas chinas,
Con su angosta melancolía.
Creció como el musgo
En las paredes de mi cuarto
Flanqueando como hiedra
Las esquinas de mi casa.
El silencio fue planta pionera
Que invadió todas mis islas
Y formando ahora un bosque
Algas, lianas y enredaderas.
Fue un iceberg
Emergiendo cada mañana,
Ecuánime lava de volcán
Que engulló cada micra
De mis territorios.
Un alud de nostalgia.
El silencio puso barrotes
Al espacio aéreo de mi cama.
Anhelé ser reclamado
Por tu risa,
Que plantaras bandera
En mis playas y riberas,
Que vinieras con tus cascabeles
A ayudarme a bajar
De la locura que me empuja
A caminar en la cornisa.
El silencio se impuso
En la partida.
Con sus ases bajo la manga,
Con sus murallas chinas,
Con su angosta melancolía.