Amanecer contigo
Es más emocionante
Que contemplar
Miles de auroras.
Cuando emprendimos el viaje
A las habitaciones del deseo,
Fue como salir expelidos
Al espacio intersideral.
Yo me comporté
Como una bestia humanoide
Que por instinto sólo piensa
En el rozar de lenguas,
En los mimos,
La ternura.
Y una vez pasado el dintel,
La sangre
Que casi se evapora.
Amanecer contigo
Es más emocionante
Que contemplar
Miles de auroras.