En medio del tráfico citadino
Desplegamos furtivamente,
Sin que nadie lo notara,
Una constelación de miradas,
Y el cielo se pobló de estrellas de deseo
Que caían como lluvia
En las primeras horas de la mañana.
Sacamos imperceptiblemente,
Oculto de la canallada,
Un mapa de tintineos entre pestañas,
Un cartapacio pleno de puntos de luz
Que hacían cosquillas a lo interno
Con su centelleante magia.
Y así privadamente
En medio de las calles sitiadas
Fuimos descubriendo
Un galáctico catálogo de móviles astros
Que unía tus ojos y mis ojos,
Como en una pasarela blindada.
En medio del tráfico citadino
Desplegamos furtivamente,
Sin que nadie lo notara,
Una carta sideral de lucecitas celestes
Con las que nos dijimos todo
Y nos silenciamos nada.
Una bitácora de cuerpos luminosos
Fueron tus ojos y mis ojos.
Danzantes estrellas de deseo
Que caían como lluvia
En medio del tráfico
Las primeras horas de la mañana.